Capítulo 6.

-Creo que tenemos la suficiente confianza para que me lo cuentes...¿no?
-Isa.
-¿Isa?
-Mi ex.
-¿Y que paso?
-Se murio.
-Oh....lo siento.
Anna empezo a jugar con mi flequillo, de vez en cuando hacia una pequeña mueca imitando una sonrisa, pero no queria estropear ese momento besandola.
-Solo hay una cosa que podría estropear este momento.
-¿Por qué tendria que estropear el momento que me beses?
-No era eso...
-¿Que era?
-Na...nada.
-Pues si lo puede estropear no lo hagas...
-No lo haré.
-Jajaja asi me gusta.
Anna se mordio el labio, ya no quedaba rastro de aquel pintalabios, quizas mañana se ponga mas...
-Me lo he pasado muy bien contigo.
-Y yo.
-Falta algo, pero no se el qué.
Me lo imagino.
-Ya...algo.
-Si, esa cosa, que hace que todo acabe siendo mas especial que antes.
-Quieres decir...
Me abrazo.
-Quiero decir esto.
-Ah...
Pense que me besaria, ¿y si doy el paso yo? No se, era tan especial aquel momento, que estaba totalmente seguro que si la besaba la perderia para todo el resto de mi vida. Anna me dio un beso en el cuello y me susurro al oido :
-Te quiero mejor amigo.
Sonreí.
-Te quiero princesita.
Se estremecio, siguio su camino y me dio un beso en el cachete, luego me dio uno en la comisura del labio, paro. Me miro a los labios y sonrio.
-¿Puedo?
-¿El qué?
-Besarte. Me gustaria probrar tus labios.
-Mira que eres rara.
-¿Entonces?
-Eso no se pregunta.
Se acerco suavemente, lentamente y con un leve rozamiento, nuestros labios chocaron, acomodamos nuestros labios para poder fundirnos en un beso. Puse mi mano en su espalda, no sabia que hacer, en ese momento me bloquee, y decidi que ella eligiera. Se separo.
-Besas muy bien.
-¿En serio?
-Si, no sabes lo que me encantaria ser tu novia.
Me rei por no llorar. Creo que cada vez me gusta mas...
-Pues entonces gracias. Tu tampoco te quedas atras eh!
-Jajajaja pues gracias tambien.
-...Tengo sueño.
-Yo lo tenia, pero con ese beso me lo quitastes todo.
-Cuando quieras otro me lo pides, o me lo robas.
-Vale.
Me volvio a besar, esta vez con mas ternura , mas romantico, pero esta vez mas largo, y se separo.
-Vas mejorando.
-Tengo un buen maestro
-Venga, creo que el mojito nos ha acabado afectando...
-Ya...¿dormimos?
-Si...
Me acoste de lado mirandola y le rodee el cuerpo con mi brazo. Acabamos dormidos, con un par de mojitos en el cuerpo, y dos besos que quedaran sellados en nuestros labios para siempre.

CONTINUARÁ